white egg on white surface

Ovum Philosophia

Ovum Philosophia” Es una expresión latina que se traduce como la “filosofía del huevo”. Más o menos quiere decir lo siguiente: “Si un huevo se estrella contra la piedra, se rompe el huevo; y si la piedra es la que se estrella contra el huevo, también se rompe el huevo”. En otras palabras, el huevo siempre lleva las de perder.

Esta curiosa frase la utilizan algunas veces para ilustrar la relación patrón – empleado; gobernante – civil; profesor – alumno; religioso – laico; y otras más donde existe una relación de superior o dirigente (simbolizada por la piedra) y una persona o grupo subalterno (simbolizada por el huevo).

La piedra en el Nuevo Testamento

Estuve analizando algunos textos de la Biblia referente a la piedra:

Les dijo Jesús:
—¿No han leído nunca en las Escrituras:
“La piedra que desecharon los constructores
ha llegado a ser la piedra angular;
esto es obra del Señor,
y nos deja maravillados”?

Por eso les digo que el reino de Dios se les quitará a ustedes y se le entregará a un pueblo que produzca los frutos del reino. El que caiga sobre esta piedra quedará despedazado y, si ella cae sobre alguien, lo hará polvo.

Mateo 21. 42-44 NVI; ver Marcos 12. 9-11; Lucas 20. 17-18; Hechos 4. 11

Notablemente Pablo expresa lo siguiente:

¿Qué concluiremos? Pues que los gentiles, que no buscaban la justicia, la han alcanzado. Me refiero a la justicia que es por la fe. En cambio Israel, que iba en busca de una ley que le diera justicia, no ha alcanzado esa justicia. ¿Por qué no? Porque no la buscaron mediante la fe, sino mediante las obras, como si fuera posible alcanzarla así. Por eso tropezaron con la «piedra de tropiezo», como está escrito:

«Miren que pongo en Sion una piedra de tropiezo
y una roca que hace caer;
pero el que confíe en él no será defraudado»

Romanos 9. 30-32

Encontramos en la Biblia diferentes significados del símbolo “piedra”. O sea que la palabra “piedra” puede ser interpretada de diferentes formas. Como intérpretes sabios podemos identificar a lo que la Biblia se refiere por el contexto.

Por ejemplo, encontramos la ley del decálogo escrita en piedras. Vemos que Dios puede levantar hijos de Abraham de las mismas piedras, o también Satanás ofrece a Jesús convertir las piedras en pan. Pero por sobre todo Jesús es identificado como la piedra, o piedra angular (ver 2 Corintios 3; Efesios 2).

Pedro lo expresa de manera muy brillante:

Cristo es la piedra viva, rechazada por los seres humanos, pero escogida y preciosa ante Dios. Al acercarse a él, también ustedes son como piedras vivas, con las cuales se está edificando una casa espiritual. De este modo llegan a ser un sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales que Dios acepta por medio de Jesucristo. Así dice la Escritura:

«Miren que pongo en Sion
una piedra principal escogida y preciosa,
y el que confíe en ella
no será jamás defraudado».

Para ustedes los creyentes, esta piedra es preciosa; pero para los incrédulos,

«la piedra que desecharon los constructores
ha llegado a ser la piedra angular»,

y también:

«una piedra de tropiezo
y una roca que hace caer».

Tropiezan al desobedecer la palabra, para lo cual estaban destinados.

1 Pedro 2. 4-8

Notablemente Jesús es piedra angular, y los que le siguen también somos llamados “piedras”

La filosofía del huevo no está relacionada con la filosofía de Jesús y debemos diferenciarlas de manera clara.

Estamos muy acostumbrados y mentalizados que en este mundo están los fuertes por un lado y los débiles por el otro. Los que tienen poder y los que no tienen. Los que tienen dinero y los que no lo tienen.

Muchas veces hasta nos resignamos a que nos maltraten y apedreen y no decimos nada para que el “poderoso” no intente lastimarnos, ya sea con palabras, echándonos del trabajo, burlándose en las redes sociales, o de cualquier otra forma.

Conozco muchas personas que simplemente viven escondidas para no recibir ninguna pedrada.

En Jesús encontramos una cosmovisión diferente

Aunque Jesús es descrito como piedra angular, piedra importante, que hace tropezar a muchos, debemos comprender este tema de manera correcta. Jesús siempre actuó de manera pacífica, y nosotros como parte del edificio de piedras también debemos actuar siempre de manera pacífica.

Jesús se aparta del concepto del Antiguo Pacto grabado en piedras y de ciertas leyes que mandaban apedrear a la gente. Esto lo vemos notoriamente en el caso de la mujer adúltera, cuando el Señor expresa: “El que esté libre que tire la primera piedra”.

Si Jesús escuchara esto de “Ovum Philosophia” estoy seguro que se opondría rotundamente a este concepto.

No siempre es necesario el choque, la agresión, ni las explosiones temperamentales para solucionar una diferencia o conflicto y mucho menos entre personas que decimos seguir a Jesús. Es muy triste ver a una persona que es apedreada por el pastor, los ancianos, los diáconos y muchas veces los mismos miembros de una iglesia.

Ovum Philosophia en la iglesia

Debemos entender que como piedras, parte del edificio del Señor, eso no nos da el derecho de creernos superior a otros. Y aunque alguien cometa un error o pecado, eso no nos da el derecho de destruir a esa persona con todas las armas posibles.

Siguiendo la misma lógica del apóstol Pedro vemos lo siguiente:

Para esto fueron llamados, porque Cristo sufrió por ustedes, dándoles ejemplo para que sigan sus pasos.

«Él no cometió ningún pecado,
ni hubo engaño en su boca».

Cuando proferían insultos contra él, no replicaba con insultos; cuando padecía, no amenazaba, sino que se entregaba a aquel que juzga con justicia. Él mismo, en su cuerpo, llevó al madero nuestros pecados, para que muramos al pecado y vivamos para la justicia. Por sus heridas ustedes han sido sanados. Antes eran ustedes como ovejas descarriadas, pero ahora han vuelto al Pastor que cuida de sus vidas.

1 Pedro 2. 21-25

Es un error tremendo pensar que somos piedras con el derecho de destruir a cualquier persona. No, mis hermanos. Somos sostenidos por La Verdadera Piedra, y esto debiera hacernos personas con un corazón de carne. No es bueno estar pretendiendo ser la última maravilla del universo, y despreciar a todos los demás por no ser “una miserable piedrita” o un “grano de arena”.

Sí vemos a Jesús señalando que muchos debieran ponerse una “piedra de molino” al cuello; y señalando a los escribas y fariseos como “piedras blanqueadas” sobre tumbas en el cementerio.

Mi hermano, mi hermana, te invito hoy a que analices tu vida en este momento. ¿Eres una piedra tipo Ovum Philosophia?, ¿o eres una piedra en el edificio del Señor?

¿Cómo estás actuando ante tus hermanos en la fe? ¿Cómo estás actuando en tu familia? ¿Cómo estás actuando ante personas que no conocen a Jesucristo?

Considero peligroso que sigamos manejándonos en las diferentes áreas con enquilistados y férreos conceptos de “Ovum Philosophia”. Yo no lo apruebo, y espero que tú tampoco.

Wolfgang A. Streich es paraguayo, tiene un Bachillerato en Teología y una Lic. en Periodismo. Es coordinador del ministerio Buenas Noticias Ilimitadas #redBnil en Paraguay.

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